No me entiende. No se trata de resignación, se trata de
aceptar que nunca será y aunque pudiera ser no me importa porque ya no pelearé
más por retener su risa sonora en pensamientos inocentes y no tanto.
Se le pasó el cuarto de hora en un reloj juez y parte de un tiempo sin tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario